En capítulos anteriores… Osea en 1,2 y 3
…Que fui a una bodega a una cata….
…Joder, he de concentrarme, pero es que el olor a vino ,humedad, colonia y la copa de vino, se me estaba revolviendo el estómago.
Se avecinaba potada importante…
Menuda mañana me esperaba.
La barrica grande
Pasado el primer discurso, el enólogo siguió explicando la buenaventuras del vino tu empezó a hablar del segundo cuatrimestre caldo.
Señoras, señores, ahora les voy a presentar una de las joyas de la casa.
Es un gran reserva cosecha del 82 , es nuestro mejor vino, lo ponemos a la venta en una semana, su precio venta al público será de unos 400 euros, para ustedes, amigos del señor Juan, quedará en 300 euros…
A mí ya me estaban cogiendo todos los males, aquel olor, la luz amarilla, el suelo de tierra, la colonias, la carasaco, que no paraba de mirarme. Y veía a todos, como en un sueño, borrosos y ondulantes. Estaba muy mareado, seguro que el pelotazo de vino, me había hecho un agujero en el estómago. Hecho mano a mi bolso de mano y cogí un Almacén, siempre llevo encima, nunca se sabe.
Me lo tomé, mientras el vasco empezaba a hablar, ahora el, yo le oía como si tuviera una cacerola por sombrero. Y encima me estaba meando. Vaya tela.
El vasco iba soltando la retaila de explicaciones sobre el vino.
– Este caldo, reposado en barrica de roble Veneciano, traído directamente de los bosques de Venecia, ha envejecido durante 35 años en estas bodegas y en estas barricas….
Yo no aguantaba más, se me estaba pasando en mareo y las arcadas, pero tenia una ganas de mear insoportables… estaba oteando si había wc, debía de tener los ojos amarillos…
– Javier ¿te escancio vino?.. ¿ estás bien? Estas pálido…
Joder era el somelier vasco, había aparecido allí de repente, casi me meo, bueno una gotilla me salió. Cruce las piernas.
– Si , gracias, Gerard. Oye para mear,donde puedo ir, es que me va a crecer la vejiga hasta límites insospechados. Tengo un amigo que murió así en este estado…
– ¿De veras? ¿Murió por no poder hacer pis? Que horror.
Yo miraba a aquel mutante y le contesté.
– Si, se estaba meando y cayo al suelo desvanecido, le atropello un camión, un coche, un camión de bomberos, una ambulancia y dos caballos.
– Pero bueno, que me estás contando..
– Es que estaba con su hijo en un tío vivo, y le pasó por encima todos los artilugios. Lo tuvieron que coger con una pala.
– Jopelines, pobre hombre, mira el lavabo esta a la entrada,por el pasillo a la izquierda, unas escaleras y en el segundo piso ,allí, cuarta puerta a la derecha. Prueba el vino, su bouque a nueces es genial. Luego te veo.
– Gracias Gerard, – pedazo de cabron, está disfrutando con mi cara de sufrimiento.- pues yo tengo que mear como sea o voy a explotar como un globo de agua.
Borja Luís, Roberto, Pocholo y Arturo, hablaban de yates y lo que les costaba el amarre en el puerto. Pocholo estaba cabreadisimo por qué le habían subido el amarre doscientos euros mes y que tendría que echar a la filipina. Los otros “mongo pijos” asentían y sonreían, por la salomónica solución del Pocholo de los cojones.
Yo estaba alucinando y meaaaaaandome que me quería morir. Encima había una pequeña fuente en el patio y yo solo oía el ruido del chorrito. No podía ser había que buscar un remedio.
Mientras el somelier vasco estaba hablando de las grandezas de otro caldo de precios de coche, yo buscaba el sitio indicado para la super mingitada.
Carla, Sandra, Seoane, Carolina, Dafne y Piluca. En la otra parte del círculo maldito de mega pijos, hablando del servicio. Que les costaba encontrar gente para servicio de la casa.
La cara saco decía que no había manera encontrar a nadie por 500 euros al mes. Y las otras arpías reían sarcásticamente… Es verdad nena, a mí se me han ido tres en dos meses.
Supongo que hablan de esclavitud, que quieren a una persona, para no pagarle como una persona, de paso pago en negro, no contribuyo a la comunidad y así me ahorro para pagar el amarre del cabrón de mi marido. Domingos a misa y solucionado.
Pasé de estar meandome a modo asesino en serie… Pero pudo más la meera.
…. Cosechado en las tierras de Don Juan, este caldo joven, de mirada Esmeralda y sabor con fondo de soto bosque, bla, bla ,bla…
Esto oía de fondo ,mientras ya estaba en modo MEGQMM, “manos en los genitales que me meo”.
Detrás de las enormes tinas, había una especie de gran vaso de metal con un palo enorme. Y se me iluminó la cara.
Para allí que fui.
El vaso con el palo, era todo metal dorado, pero que allí cabía toda le meada que iba a echar y que ya saboreaba..
Dicho y hecho, me acerque al vaso, aprovechando que el somelier y los Enólogos estaban hablando de taninos o no se qué hostias y mee. Y mee… Y mee, joder reviso y todo, y casi pierdo el conocimiento, me senté allí mismo, tras las tinajas esas hasta que se me pasó un poco. Abrí mi fiambrera y me puse a comer una pechuga de pollo empanado. Me sentaba de maravilla… hasta que…
– Javi!!, Javi.!! Donde estas .? Estás por aquí.
Me cago en todo, era Juan, que me buscaba y se iba acercando y yo con la boca llena de pollo… Me estaba atragantado…
– Voy Juan.!!! – dije poniéndolo todo perdido de pollo y el aceite que me chorreaba por la comisura de la boca – ya voy, es que estaba aquí, mirando el smdksjdndj. !!!
– Vale , ven para aquí que vamos a probar un buen vino de la barrica grande!!
– Voy, voy – que coño será la barrica grande –

Continua en capitulo 5
©Javier Sanchez 2018